Los que seguís este blog desde hace tiempo, ya sabéis que desde que nació mi primer hijo, hace ya 12 años, cada Navidad enviamos las felicitaciones navideñas que preparamos en casa para la ocasión.
Cada año digo que será el último, pero reconozco que a pesar del trabajo que lleva ¡me encanta prepararlas! Además tengo que decir que a Guille le encanta hacerlas conmigo por lo que desde hace un tiempo por fin tengo un duende ayudante.
Tenía ganas de preparar una SHAKER CARD que se ven tanto por las redes por lo que aprovechando la ocasión preparé esta navideña.
Además de la ayuda de mi duendecillo ayudante, decidí utilizar mi cameo para hacer el diseño y las piezas de mi tarjeta. Sí, sí, habéis oído bien.
Yo solita me diseñé las piezas de la bola de nieve que sería mi primera shaker card.
Cada tarjeta necesita estas piezas:
Dentro de la bola iría una foto nuestra vestidos de duendes navideños. Imprimimos el montaje y con los rotuladores COPIC duendecillo Guille y yo coloreamos cada uno de ellos.
No habíamos probado estos rotuladores antes, pero nos han encantado. La única pega es el precio que tienen, pues no son precisamente baratos...
También dibujamos y coloreamos más detalles para poner en las bolas, como por ejemplo estos muñecos de nieve que dibujó Guille.
Cada una de las tarjetas es diferente lo que hace cada una de ellas única y especial.
Montamos y decoramos.
¡Listas para enviar a sus destinatarios! Con un mensaje de Paz, ¡que falta nos hace con la que está cayendo...!
Pusimos una cuerdecita en la bola por si al recibirla preferían ponerla colgada en el árbol.
Aunque correos no ha ayudado mucho porque algunas personas aún no han recibido su felicitación, reconozco que me encanta enviar estas felicitaciones año a año. Me da mucha pena que se pierda esta tradición y oye que menuda alegría da abrir el buzón y encontrar algo que no sea publi o facturas.
Si queréis echar un vistazo a las de otros años pincha AQUÍ, AQUÍ y AQUÍ.
Espero que os haya gustado nuestra tarjeta de este año aunque lleva bastante trabajo, el resultado me parece ideal ¿verdad?
A mi duendecillo ayudante Guille y a mi nos encantará leer vuestra opinión.
Millones de besos para todos,
Miriam y Guille.