El año pasado conseguí convencer a mi marido de la necesidad de tener en casa una heladera.
El pobre, como siempre, me miró con cara de resignación absoluta y me regaló una máquina de Taurus verde monísima. Tengo que decir que la prefería fucsia, pero no había en stock, así que volví a casa con mi nueva heladera, y con la promesa de hacerle a mi marido el HELADO DE PLÁTANO más rico que hubiera probado.
Este es el sabor favorito de César y aunque parezca increíble no es fácil encontrarlo en la mayoría de las heladerías.
Después de varios intentos y de críticas durísimas acerca de la dulzura, la textura o el sabor puedo decir que he conseguido LA RECETA PERFECTA.
Para las primeras pruebas seguí la receta del libro que viene con la heladera y utilicé leche y azúcar glas tal y como ponía, pero a César le pareció que estaba muy dulce y la textura no era demasiado cremosa.
Por eso después de darle mil vueltas, pensé en cambiar la leche por yogur griego que es más graso y queda más cremoso. Además, el plátano si está muy maduro es muy dulce por sí mismo, por lo que suprimí el azúcar y a cambio añadí una cucharadita de sirope de maíz de tal manera que no cristalice al congelar.
Después de un máster en helado de plátano os dejo con la receta.
RECETA DE HELADO DE PLÁTANO
(por Miriam Prada)
Yo lo he hecho en la heladera, pero también se puede hacer sin ella aunque el proceso es más pesado.
Sólo tenéis que poner la mezcla en el congelador en un recipiente de plástico y remover cada dos horas varias veces, así conseguiremos que no cristalice. ¡ Eso o conseguir que os regalen una heladera !
Esta receta la he preparado con mi mini chef y le ha encantado preparársela a su papi. La máquina es tan sencilla de utilizar que es perfecta para hacer recetas con los niños, un motivo más para tenerla en casa si aún no os habéis animado.
Una vez que lo sacamos de la heladera, lo ponemos en un recipiente de plástico, lo alisamos, quitamos el aire y ponemos papel de horno por encima. Tapamos y congelamos.
Es un helado con un intenso sabor a plátano muy rico y sano y que además admite otras variantes como añadirle chocolate, canela.... Creo que después de esto César ha entendido la necesidad de mi heladera en casa :)
Los boles con la cucharita son un regalito de mi suegra. Monísimos, ¿ verdad ? No recuerdo de donde son, pero los he visto parecidos en la tienda de Aloja do Gato Preto.
Tengo que seguir practicando con la cuchara de helados porque lo de hacer bolas aún se me resiste un poco.
Mi heladera está que echa humo, y vosotros, ¿os animáis a preparar vuestros propios helados ?
Mil besos,
Miriam